El estudio, en el que han participado la Universidad de Granada (UGR), varios hospitales y la Dirección General de Salud Pública de la Junta de Andalucía, ha certificado la eficacia de Nirsevimab frente al virus respiratorio sincitial (VRS) en lactantes.

El estudio demostró que, aunque los niños que reciben este fármaco pueden infectarse por el VRS y acabar hospitalizados, la gravedad de los síntomas clínicos durante la hospitalización es mucho menor que la de los niños que no reciben la inmunización.

Mario Rivera, investigador del Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Granada (UGR), que participa en este estudio, ha explicado que Nirsevimab no es un tratamiento, sino una medida preventiva no vacunal basada en el uso de un anticuerpo monoclonal de efecto prolongado.

Algunas comunidades autónomas españolas, como Andalucía, han sido pioneras en la implantación de esta medida, que ha evitado desenlaces graves en niños con este virus tras su hospitalización.

El estudio de cohortes retrospectivo incluyó a 222 bebés hospitalizados por VRS en nueve hospitales de todas las provincias andaluzas.

Los científicos analizaron la frecuencia de desenlaces hospitalarios, incluyendo bebés que requirieron asistencia respiratoria, ventilación mecánica o ingreso en UCI, entre otros, en función de si los niños estaban o no inmunizados con Nirsevimab.

Observamos que los niños inmunizados con el fármaco necesitaban menos asistencia respiratoria y permanecían menos tiempo en el hospital que los niños no inmunizados con Nirsevimab", añadió Rivera.

Los datos indican que, aunque Nirsevimab no es infalible, es beneficioso para los niños inmunizados que requieren hospitalización por VRS.

En 2023-2024, España se convirtió en pionera en el uso de este nuevo medicamento, utilizándolo de forma sistemática en bebés de diferentes comunidades, como Andalucía, con una cobertura del 94 por ciento de la población.