El vigilante de los hinchables de la playa dio la voz de alarma a las 7 de la mañana y dijo haber visto un cocodrilo de poco más de metro y medio. También dijo que había un rastro en la arena que coincidía con el del gran reptil, según el Diari de Tarragona.

Según el periódico local, agentes y socorristas están vigilando la playa y no han encontrado indicios de la presencia del cocodrilo.

Al no encontrar indicios del gran reptil, se ha detenido la investigación en la playa, que luce bandera amarilla desde las 10.30 horas, por lo que ya está permitido el baño.

Aunque los avistamientos de este animal en agua salada son poco frecuentes, cabe recordar que a principios de este mes de agosto fue capturada una cría de caimán en un río cercano a Barcelona.