Tras las obras de remodelación integral de la Puerta del Sol el año pasado, ahora se ha acordado una solución para los toldos.

Tras semanas de "complejos análisis y cálculos" para abordar este problema, se ha encontrado una solución: la instalación de toldos "seguros para los peatones, que soporten las rachas de viento y respetuosos con el patrimonio", ya que los edificios que conforman el centro están considerados Bienes de Interés Cultural (BIC), según informa ABC.

La Comisión Local de Patrimonio Histórico, tras comprobar in situ una muestra de los anclajes y del tejido que se utilizará, ya ha dado su visto bueno, aunque el proyecto aún tiene que salir a licitación.

"Para que madrileños y turistas puedan seguir viendo la plaza y sus fachadas, la tela tenía que ser muy específica. Hemos tenido que seguir unas pautas que han hecho este proceso algo más complejo", señalan desde el Ayuntamiento de Madrid.