Según el diario ABC, las tres empresas en cuestión (Lime, Dott y Tier Mobility) operan un total de seis mil patinetes repartidos por la capital española.

Esta semana, el concejal de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha firmado el decreto que impide operar a estas empresas, lo que provocará que los dispositivos en cuestión desaparezcan de la ciudad a partir de octubre de este año.

"Nuestra prioridad es la integridad física y la seguridad de los madrileños. Revocamos la autorización de las empresas que operan con patinetes en las calles de la ciudad. Han incumplido las condiciones impuestas para garantizar la seguridad de los peatones, especialmente de las personas mayores. La revocación será plenamente efectiva en octubre", escribió el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, en X (antes Twitter).

Según ABC, citando al alcalde, no se han introducido mejoras tecnológicas para garantizar que los usuarios no circulen por las aceras o aparquen en lugares inadecuados. El número de patinetes y su distribución por la ciudad tampoco cumplían las condiciones impuestas.

No obstante, los usuarios que tengan su propio patinete pueden seguir circulando con normalidad.