Los hechos ocurrieron sobre las 18:00 horas en un edificio de la calle Orense, en el centro de Alicante.



El niño fue visto colgado del balcón por unos viandantes que consiguieron alertar al vecino de la situación.

Entonces, el vecino se desplazó valientemente varios metros por el exterior del edificio para empujar al niño y ponerlo a salvo mientras los que estaban abajo filmaban el rescate.