Según la Agencia Europea, este descenso significa que la tasa de reconocimiento ha alcanzado el nivel más bajo de su historia, lo que se explica en parte por la disminución del número de solicitudes presentadas por ciudadanos sirios tras la caída del régimen de Bashar al-Assad en diciembre de 2024.

A raíz de los cambios políticos en Siria, hubo "muchos menos sirios [que] solicitaron asilo durante el primer semestre de 2025", lo que también provocó que los sirios dejaran de ser la principal nacionalidad en las solicitudes de asilo en la Unión Europea.

Según la Agencia de Asilo de la Unión Europea (EUA), los venezolanos y los afganos se convirtieron en los ciudadanos que más solicitudes de asilo presentaron en los primeros seis meses de 2025.

"Con menos sirios solicitando asilo, Alemania dejó de ser el principal destino de la UE; Francia y España recibieron el mayor número de solicitudes en el primer semestre de 2025, mientras que Grecia y Chipre recibieron el mayor número de solicitudes per cápita", afirma la AEU.

También señala que el número de casos pendientes de una decisión en primera instancia se mantuvo en niveles casi récord, con 918.000 pendientes a finales de junio de 2025.

"Se estima que el número total de casos, incluidos los que están en fase de recurso o revisión, pendientes de una decisión a finales de mayo de 2025 (los datos más recientes) es de aproximadamente 1,3 millones", señala el informe.

Añade que, a finales de junio de 2025, había aproximadamente 4,5 millones de beneficiarios de protección temporal en la UE que huyeron de Ucrania tras la invasión rusa, y que "la mitad fueron acogidos en Alemania y Polonia", aunque la República Checa acogió al mayor número de beneficiarios per cápita.

Citado en la declaración que acompaña al informe, el Comisario europeo de Interior y Migración, Magnus Brunner, explicó la disminución del número de solicitudes de asilo como resultado del Pacto sobre Migración y Asilo, que introdujo "procedimientos más eficientes", en particular para las solicitudes con pocas posibilidades de éxito, de modo que "se tramiten con mayor eficacia".

Según Brunner, otras propuestas "reforzarán la cooperación con terceros países, garantizando retornos efectivos y aliviando la presión sobre los sistemas de asilo".

Analizando los últimos diez años, los datos del informe muestran que en 2015 y 2016, Europa recibió alrededor de 3 millones de migrantes y solicitantes de asilo, durante el periodo conocido como la crisis de los refugiados. Esta cifra se redujo a poco más de 673.000 en 2017 y a menos de medio millón en 2020, a raíz de la pandemia del COVID-19.

A partir de entonces, el número siguió aumentando, superando los 1,1 millones de solicitantes en 2023, antes de volver a caer en 2024, aunque ligeramente, a poco más de un millón.

Entre enero y julio de 2025, la UE recibió casi 400.000 inmigrantes y solicitantes de asilo, entre ellos un número creciente de ciudadanos venezolanos debido a la "profunda crisis económica y política en Venezuela", pero también unos 42.000 afganos.

Mientras tanto, el porcentaje de personas que solicitaron asilo y obtuvieron ese estatus se mantuvo en el 40% durante los últimos tres años y "cayó al 25%" durante el primer semestre de 2025, un fenómeno "impulsado por una fuerte caída de las decisiones emitidas a solicitantes sirios."